Page 87 - Salud y políticas públicas

MEDIDAS DE PREVENCIÓN ANTE DESASTRES EN HOSPITALES DE TERCER NIVEL ¿ESTAMOS PREPARADOS? 87 determinada, causan daños y que por su magnitud exceden la capacidad de respuesta de la comu- nidad afectada (H. Congreso de la Unión, 2013). Por su origen, los fenómenos se clasifcan en: No Naturales o Antrogénicos que es un agente perturbador producido por la actividad humana y los Naturales que son fenómenos que ocurren a menudo alrededor del mundo, actualmente se han presentado con frecuencia de manera inesperada y por ende, las sociedades no están prepa- radas para enfrentarlos, siendo una necesidad urgente donde los establecimientos de salud deben de estar preparados, facultados y en capacidad para actuar, en caso de emergencia. Más de la mitad de los 16 mil hospitales de América Latina y el Caribe están situados en zonas donde el riesgo de desastres naturales, o provocados por el hombre, es elevado. Muchos de ellos se han perdido a causa de terremotos, huracanes e inundaciones (OMS, 2014). Según estudios realizados, aproximadamente, el 50 % de los hospitales en América Latina y el Caribe están ubi- cados en zonas de alto riesgo, lo que ha ocasionado la interrupción en la prestación de servicios de salud y ha dejado a la población sin posibilidades de acceder a los mismos. A consecuencia de estos fenómenos se han perdido más de cien hospitales y 24 mil camas en nueve países de Latino- américa, afectando a una población usuaria de 10 a 12 millones de seres humanos, estimándose las pérdidas económicas en tres mil 120 millones de dólares (Ramírez, 2011). En lo que corresponde a México, el sismo del 19 de Septiembre de 1985 tuvo intensidad de 8.1 grados en la escala Richter, su duración fue de dos minutos, tiempo sufciente para provocar la tragedia más grande jamás vista en la ciudad de México. En un instante 400 edifcios públicos y otros mil 700 sufrieron daños parciales, miles de personas -familias completas, trabajadores sanita- rios, de la industria textil, entre muchos otros- quedaron atrapadas entre toneladas de escombros y el drama se repetía una y otra vez. Los cuerpos de emergencia no fueron sufcientes para aten- der el gran número de víctimas, además del gran número de llamadas de auxilio por derrumbes. Según las cifras ofciales el terremoto, dejó un saldo de seis mil 500 muertos, aunque años después se reconoció que las cifras pudieron haber llegado a 20 mil víctimas fatales y 30 mil heri- dos; los daños materiales se calcularon en cuatro mil millones de dólares. El gobierno reportó el fallecimiento de entre seis y siete mil personas. Años después se calculó en 10.000 muertos, las Universidad Autónoma de Chiapas