Page 88 - Salud y políticas públicas

MIRIAM GÓMEZ-ORTEGA 88 ANDREA GUADALUPE SÁNCHEZ-ARIAS BÁRBARA DIMAS-ALTAMIRANO personas rescatadas con vida fueron aproximadamente cuatro mil. Hubo casos de rescate hasta diez días después del siniestro. Entre los edifcios más emblemáticos derrumbados o parcialmente destruidos durante el terremoto están el Hospital General de México, el Hospital Juárez y el Centro Médico Nacional donde se llegaron a rescatar a poco más de dos mil personas, a pesar de que en el derrumbe quedaron atrapados tanto el personal sanitario como los pacientes que se encontraban en ellos (El Diario, 2013). El origen de la problemática es que México tiene un alto nivel de exposición al peligro sís- mico por estar ubicado en el Cinturón de Fuego del Pacífco que lo forman las placas tectónicas Norteamericana, Cocos, Rivera y del Pacífco; considerado como una importante zona genera- dora de sismos. Estos fenómenos son impredecibles y tras la ocurrencia de un sismo, la principal causa de víctimas y daños en zonas urbanas se relaciona con el derrumbe parcial o total de las construcciones. Por ello, es sustantivo estar preparados y contar con reglamentos de construcción actualizados y respetarlos para reducir riesgos, garantizar la calidad y seguridad de las edifcaciones (H. Congreso de la Unión, 2013). Sin menospreciar la importancia de otras, en este trabajo se hará énfasis en las edifcaciones destinadas a la atención médica. Probablemente por omisión de actividades de mantenimiento -tanto correctivo como pre- ventivo- en 20 años atrás, la infraestructura del Sector Salud ha sido particularmente vulnerable a estos daños, tanto así que más de 100 hospitales y 650 unidades de salud resultaron afectados a consecuencia de desastres naturales, ya sea por haber colapsado o haber quedado en condiciones vulnerables que exigieron su desalojo. Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), las pérdidas acumu- ladas por este concepto en la Región ascendieron a 3 mil 120 millones de dólares, lo que podría compararse a una situación extrema en la que los 20 países de la región hubiesen sufrido (cada uno) la demolición de 6 hospitales y por lo menos 70 unidades de salud (OPS, 2003). La Organización Panamericana de la Salud (OPS), consciente de la situación, lanzó en 1997 su proyecto Hospital Seguro para enfrentar desastres, que se defne como aquél que cuenta con la estructura funcional y organizativa para soportar de la mejor manera una desgracia. Esta propues- Universidad Autónoma de Chiapas