Page 48 - TRANSFERENCIA TECNOLÓGICA
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48       TRANSFERENCIA TECNOLÓGICA PARA LA PRODUCCIÓN
                           DE LADRILLO ROJO EN TONALÁ, CHIAPAS






                      I.7. Mercado: oferta y demanda

               El precio del ladrillo “normal” es de $1,000.00 el millar “in situ”, pero el “jumbito” cuesta

               $1,500.00 el millar, también “in situ”. Este material tiene una alta demanda, ya que los buscan
               mucho los lugareños, debido a una propiedad adicional de estos productos, que son alta-

               mente térmicos, por lo que son ideales para la construcción de casas en estos asentamientos.

               Podría decirse que esta es la ventaja competitiva que tienen los productores de ladrillo rojo

               (Porter, M., 2002).

                    La demanda es tal que la mayoría trabaja sobre pedidos pagados de antemano, estos

               tratos se hacen a la finalización del tiempo de lluvias, cuando empiezan a trabajar estas orga-

               nizaciones.



                      I.8. Proceso de fabricación del ladrillo en Tonalá, Chiapas

               En Chiapas, la producción se realiza totalmente con herramientas manuales tradicionales como

               son pico, pala y carretillas, incluso hasta con las manos, esto lo hacen cuando realizan el pro-

               ceso de moldeado del lodo. Finalmente, ya moldeado el lodo en ladrillos, estos tienen que ser

               quemados en hornos tradicionales, construidos por ellos mismos, con una temperatura que

               alcanza hasta 900º C.
                    El proceso de fabricación del ladrillo consiste, primero en extraer del suelo, el lodo negro


               que es la materia prima, debe de estar limpia de impurezas o de material orgánico, posterior-
               mente se le agrega agua y es amasada (ver figura 8), es decir, preparar el lodo para meterlo

               en moldes de madera.

                    Después, los ladrillos que han salido del molde se dejan secar a la intemperie, unos tres

               días bajo el sol, a continuación de haberse secado, los ladrillos están listo para ser quemados

               en hornos artesanales, con combustibles como la leña.








                             Universidad Autónoma de Chiapas
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