Page 166 - Salud y políticas públicas

BÁRBARA DIMAS ALTAMIRANO 166 ANDREA GUADALUPE SÁNCHEZ ARIAS MIRIAM GÓMEZ ORTEGA y 90 años), malnutrición, traumatismos, enfermedades crónicas, tratamientos con inmunosupresores y antimicrobianos, así como que están sometidos a procedes invasivos diagnósticos o terapéuticos, que los hacen más susceptibles de adquirir infecciones durante su estancia en el hospital. El tercer elemento de la cadena es el medio ambiente, tanto animado como inanimado, que está constituido por el propio entorno hospitalario, los equipos e instrumental para el diagnóstico y tratamiento, los materiales de cura y las soluciones desinfectantes, entre otros, y sobre todo, el personal asistencial, con particular énfasis al de enfermería, que observa un contacto estrecho y constante con las personas internadas. La infección nosocomial representa un desafío creciente en todas las instituciones de salud, la mayoría de las infecciones son endémicas y se propagan continuamente. A diferencia de los brotes epidémicos, en que las medidas a adoptar deben ser tomadas con celeridad, en las infecciones endémicas se requiere de una concertación de medidas de diversos grados de complejidad para enfrentarlas que, en general, precisan de tiempo, organización y recursos. Dichas medidas se enmarcan dentro del programa de lucha contra las infecciones, que constituyen la estrategia más útil para lograr su prevención y control, y que son llevadas a cabo a través de una estructura, el comité de prevención y control de las infecciones intrahospitalarias, que tiene toda la capacidad científca del hospital en función de esta labor. Las medidas de bioseguridad deben ser una práctica rutinaria en las unidades médicas y deben ser cumplidas por todo el personal que labora en estos centros, independientemente del grado de riesgo común su actividad y de las diferentes áreas que compone el hospital, es un pro- grama para el control epidemiológico de infecciones nosocomiales, son medidas fundamentales para evitar la transmisión de gérmenes patógenos. La biodiversidad tiene como principio básico: no me contagio y no me contagio; por lo tanto, debe de entenderse como: una doctrina de comportamiento encaminada a lograr aptitudes y conductas que disminuyan el riesgo de adquirir infecciones. La bioseguridad es un conjunto de medidas preventivas destinadas a proteger la salud de los pacientes y del personal de salud expuesta a agentes infecciosos y, como consecuencia de ellos, disminuir el riesgo de infectarse y/o enfermar. Los principios básicos de bioseguridad Universidad Autónoma de Chiapas