Page 47 - Tecnologías, lectura y nuevas alfabetizaciones

ALFABETIZACIÓN DIGITAL Y LA TRANSFORMACIÓN DE LA LECTURA 47 Lo anterior sienta las bases para la refexión de que no sólo se requiere de destrezas o habi- lidades específcas para conocer el mundo a través de las tecnologías, sino saber leer el mundo con nuevos ojos, valores y actitudes. El reto, entonces, es replantear la manera de leer y escribir en el contexto de la convergencia digital, por el cambio fundamental en la dinámica de la forma de hacerse de conocimiento y comunicarse. Eduardo Gutiérrez (2009) sostiene que la lectura se ha fexibilizado para ser capaz de abarcar un conjunto de usos e intercambios de códigos diversos que incluyen imágenes, espacios y gra- máticas cifradas que han descentrado el código escrito y encontrado otra semiótica para producir, difundir y generar conocimiento. A partir de la digitalización de la información, la práctica y comprensión lectora ha debido transformarse también desde un estadio de apropiación de un texto, a asumir una lectura como un hecho cultural y comprenderla como un hecho social y cultural. Desde esta perspectiva, las tecnologías proveen un entorno comunicativo que permite al lector desprenderse del contexto presente e inmediato para ampliarlo y redefnirlo. García Canclini (2007) visionaba un escenario en donde se podría ver en una pantalla de una computadora lo que se encontraba en aquel entonces únicamente en el cine, la radio, la televisión, los diarios, los libros, equipos de música, teléfonos e incluso museos. Todo ello es una realidad en la actualidad y puede afrmarse que ha modifcado la práctica lectora en un sentido más sociológico. A fnales del siglo pasado (década de 1990) se veía a la televisión como una amenaza para la lectura. Hoy, la convergencia digital articula una integración multimedia que permite “ver y escuchar en el móvil, la palm o el iPhone audio, imágenes, textos escritos y transmisión de datos, tomar fotos y vídeos, guardarlos, comunicarse con otros y recibir las novedades al instante.” (García Canclini, 2007, p. 50), lo que más que alejar a una persona de la lectura, le permite interactuar con la cultura oral y la audiovisual-electrónica y multimedia. La Encuesta Nacional de Lectura (Secretaría de Educación Pública [SEP], 2015), indica que en promedio los mexicanos leen 2.9 libros al año, y sólo 2% de la población tiene como hábito permanente la lectura. El 41% de la población que dedica su tiempo libre a ver televisión. Universidad Autónoma de Chiapas