Page 113 - Salud y políticas públicas
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LA COMPLEJIDAD EN LA COMPRENSIÓN DE LA RECONSTRUCCIÓN DE LA VIDA DESPUÉS DE DESASTRES. EL CASO DE HABITANTES 113 DE JUAN DEL GRIJALVA, OSTUACÁN, CHIAPAS Los habitantes de las comunidades afectadas, ahora ubicados en campamentos, si bien se co- nocían, no vivían tan cerca unos de otros. Las viviendas en este espacio estaban contiguas unas a otras. Adicionalmente, llegaron damnifcados de otras localidades, lo que implicó nuevos aprendi- zajes y construcciones sociales. Puesto que si bien eran: “muy cercanos a la geografía interior, de la arqueología de las sensaciones, pulsiones, pasiones en las que todos acabamos por reconocernos. A aquello que nos refeja más allá de cualquier circunstancia como seres humanos” (Petterson, 2013); aún así se perciben entre sí como distintos, tienen procedencia diferente, vienen de espa- cios, historias y culturas distintas. Si bien recibieron apoyos del gobierno con alimentos, algunos muebles y los servicios sin costo para las familias, las condiciones estaban muy lejos de aproximarse a lo que se quedó atrás, y traían en su imaginario individual y colectivo. Lo perdido era todo su mundo, el cielo; lo real era ajeno sin sentido, el inferno. Qué pensaron y sintieron las personas que debieron compartir estos espacios comunes, tan lejanos a su costumbre, se puede apreciar en el siguiente testimonio: “…hoy vivimos muy encerrados y amontonados, hay más bulla, escuchamos y nos enteramos de los problemas de todos los vecinos (…). Hace tres días falleció un joven, que se colgó en su vivienda (…) hace un año el hermano de esa misma persona se murió (...) la casa de este campamento no está tan bien, nos ha costado mucho adaptarnos (…) la vida en el campamento ha sido muy difícil porque no me hallo, yo estaba acostumbrada a mi casita, ahora no tengo nada de eso además no me gustaba salir, prefiero la tranquilidad.” Rosa Elena Bouchot Rodríguez, 50 años. Juan del Grijalva. Hay un doble fenómeno, unidad y diversidad de las culturas que es de vital importancia para comprender el malestar de la gente en los campamentos. Las culturas -dice Morín (1999: 42)- mantienen las identidades sociales, en lo que ellas tienen de específco…pero también son abiertas, integran a ellas no sólo saberes y técnicas, sino también ideas, costumbres, alimentos… las asimilaciones de una cultura a otra son enriquecedoras. Universidad Autónoma de Chiapas