Page 83 - FRUTAS DEL TRÓPICO
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estRategias de poda paRa maximizaR el Rendimiento de mango tRópical
                                                             desde el tiempo de siembRa hasta la RestauRación de hueRtos viejos  83






           sincronizado será reproductivo, aun en temperaturas cálidas >20 °C (Fig. 5D). Por lo tanto, la
           poda de puntas se hace para favorecer una respuesta de floración uniforme en un programa

           de manejo de floración, para darle una forma deseada al dosel y para mejorar la productividad

           de árboles en producción al incrementar significativamente el número de tallos con fruto.

                La mejor forma de llevar a cabo la poda de puntas es con machetes afilados y escaleras, u

           otros medios con los que el trabajador pueda alcanzar la parte superior de los árboles en los

           trópicos (Fig. 6A). Existe también una variedad de máquinas para la poda (Fig. 6B) para traba-

           jar rápidamente en huertos extensos, pero son muy caras, a menos que varios productores

           compartan el costo. Se debe podar la mayoría de los tallos terminales en el dosel para obtener

           los mejores resultados (Fig. 5B). Los cortes no deben ser más profundos que la tercera unidad
           de intercalado para desalentar segundos flujos no deseados. En las islas del Caribe y en Cen-

           troamérica, la poda de puntas a principios de septiembre permite una edad suficiente para la

           floración óptima del flujo resultante en enero-febrero.



                Poda de formación

           El objetivo de la poda de formación es reducir las dimensiones del dosel en árboles que están

           demasiado atestados, o para facilitar el trabajo de la poda de puntas como parte de un progra-

           ma de manejo de floración. Este tipo de poda requiere de cortar ramas que varíen en tamaño

           desde 2 hasta 10 cm de diámetro, dependiendo del tamaño original de los árboles. La profun-

           didad de la poda en el dosel debe ser al menos un metro por dentro de las dimensiones finales

           deseadas para dar espacio al re-crecimiento del dosel (Fig. 7A). En la Figura 7B se muestran

           árboles podados en la misma fila que los árboles de la Figura 7A. Los árboles de fondo nos
           dan un punto de comparación del tamaño original. El re-crecimiento resultante fue podado

           de las puntas dos veces durante el año después del evento de la poda de formación y serían









                                                                Universidad Autónoma de Chiapas
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