Page 225 - Fútbol y globalización
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FILOSOFÍA Y FÚTBOL. ANÁLISIS FENOMENOLÓGICO
                                                                DE LA PUNTERÍA: EL CASO DE UN TIRO PENALTI       225






           asociación describe la “formación de complejos pre-intencionales de sensación” (Bernet, Kern y
           Marbach 1993, p. 134) o “la génesis de un campo sensible” (García-Baró, 1993, p. 138) a través
           de la síntesis (total o parcial) de los contenidos o datos hyléticos. Esto último se refleja en lo que
           Husserl denomina “apariciones motivadas” correlativas a las “cinestésicas motivantes” muy visibles

           en lo que podemos denominar horizonte cinestésico práctico, esto significa que la movilidad de
           nuestro cuerpo es el origen de todo tipo de acciones dentro de una esfera práctico-volitiva.
                Con ello, nuestras motivaciones y afecciones serían una especie de “movimientos poten-
           ciales” voluntarios o involuntarios; en cuanto tales, son movimientos libres, y por libres hay que

           entender nuestra habilidad (normal) de movernos inmediata y espontáneamente sin ningún tipo
           de implicación automatizada que “pre-figure” nuestro movimiento. Antes bien, el yo-puedo es
           principio de la acción que en cierta medida busca su cumplimiento mediante la actividad del cuer-
           po. Hay así una motivación y algo motivado, lo que se traduce en condiciones del tipo: “si giro de

           tal manera mi cabeza entonces el objeto percibido, digamos un cuadro¸ ya no aparece o aparece
           de otro modo”. De igual modo, la correlación entre la conciencia constituyente (corporalizada) se
           ve reflejada en las variaciones de la naturaleza, dado que proporciona determinaciones objetivas
           al espacio objetivo y donde a cada movimiento cinestésico le corresponde una serie de matiza-

           ciones de las cosas.



              CINESTESIA Y LIBERTAD EN LA EXPERIENCIA DE EJECUTAR UN PENALTI

                Las cuestiones anteriores, como puede notarse, están vinculadas a la experiencia de la eje-
           cución de un penalti: el cuerpo del jugador que lanza o patea un objeto (el balón), la “conciencia

           corporal” de esta actividad, el problema de la percepción externa e inadecuada y la experiencia
           temporal o las alteraciones temporales (el ahora del presente hacia el ahora-todavía-no del futuro
           antes de escurrirse hacia el ahora-ya-no del pasado). Este sentido de la vivencia al ejecutar un

           penalti, como ya advertí, está centrado en las experiencias cotidianas y/o profesionales de jugar
           fútbol, así como de aquello que podemos denominar apuntar estático.    4

           4   Serrano de Haro, en el texto antes citado, hace la diferencia entre el apuntar estático y el apuntar en movimiento. En el
           primer caso, la experiencia del penalti queda perfectamente demarcado. Pues se trata de cierta posición en la que el cuerpo del
           ejecutante permanece “sin movimiento”. En cambio, en el apuntar en movimiento no solo ocurre el movimiento del blanco,
           sino también el movimiento de quien ejecuta el tiro, y en ocasiones en sentidos y trayectorias dispares. Por ejemplo, cazar a
           caballo, el remate en el voleibol. Incluso el fútbol también tiene este tipo de experiencias, por ejemplo, el remate de cabeza
           o los pases filtrados. En todos los casos anteriores, lo que se busca es el móvil al que se le imprime un cambio de dirección.






                                                                Universidad Autónoma de Chiapas
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