Page 224 - FRUTAS DEL TRÓPICO
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               crónicamente infectadas presentan a menudo solamente un penacho de hojas pequeñas en
               el ápice. La floración y el prendimiento de la fruta ocurren raramente en las plantas infectadas

               (Ploetz et al., 1994; Ploetz, 2003). La ausencia de flujo de látex en punciones o heridas en las

               hojas, pedúnculos y frutos, es una prueba válida para esta enfermedad.

                    El bunchy top es transmitido por dos chicharritas Empoasca papayae y E. stevensi, y la

               distribución de la enfermedad coincide en gran parte con su distribución (Ploetz et al., 1994;

               Ploetz, 2003). El insecto citado anteriormente es el vector principal, y es la única chicharrita

               que se conoce asociada a la papaya. Los insectos de ambas especies por sí solos pueden trans-

               mitir el agente causal y los síntomas aparecen a los 30 ó 45 días después de la inoculación. El

               nivel de tolerancia en un cultivar afecta el grado y la severidad de la expresión de los síntomas.
               Los cultivares tolerantes son útiles donde la presión de la enfermedad es baja. El control ha

               sido alcanzado aplicando insecticidas sistémicos para el control del vector y destruyendo las

               plantas infectadas para permitir el desarrollo de yemas axilares sanas (Cook, 1972). La terapia

               con antibióticos aplicados a la raíz ha resultado en la remisión de síntomas.

                    Mancha anular de la papaya. La mancha anular de la papaya es causada por el “potyvirus

               Papaya ringspot virus” que es un virus no persistente, transmitido por un áfido, es la enfer-

               medad más extendida y más destructiva de la papaya (Ploetz et al., 1994; Ploetz, 2003). Las
               plantas de todas las edades son susceptibles y los síntomas son generalmente más severos

               durante las temporadas más frescas. La enfermedad deriva su nombre de los anillos hundidos

               de color verde oscuro característicos que se desarrollan en pecíolos y en la fruta de las plan-

               tas infectadas, que suelen persistir como marcas de color anaranjado a pardo cuando la fruta

               madura. Las rayas verde oscuro hundidas y húmedas se desarrollan en pecíolos y tallos. Hay

               formación de moteado y de mosaico de variada severidad que se desarrollan en las hojas y











                             Universidad Autónoma de Chiapas
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