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FÚTBOL Y GLOBALIZACIÓN
96 MEDIOS, MERCADOS E INCLUSIONES
han buscado cerrar la brecha (cuantitativa y/o cualitativa): Monterrey, Toluca, Querétaro y Tigres.
Monterrey ha hecho un excelente trabajo al mantener igual el número de patrocinadores. Más
virtuoso aún en el sentido de propiciar una inclusión diferenciada, lo cual, de mantenerse, podría
llevar a un cambio con una igualdad diferenciada: para el caso de las mujeres uno de los patroci-
nios no coincide con el de los varones (Bokados para la LMXF y Tecate para la LBBVAMX). Toluca,
que empezó con un uniforme diferenciado en el número de patrocinadores, para el Apertura
2018 contó con un uniforme igual, tanto en diseño como en número de patrocinadores. Queré-
taro es otro caso de equiparación de patrocinios para el Apertura 2018, acabando con la brecha
inicial. Tigres, aunado quizá a Chivas y Atlas, son casos que ayudan a entender algo: no está tallado
en piedra que los cambios (agregar, sustituir o eliminar patrocinadores) tengan que darse solo al
final de un año completo. Al igual que el Atlas, pasó de no tener un solo patrocinador además del
fabricante del uniforme a tener cuatro; 4) casos de retroceso: Pachuca ha pasado de contar con
una paridad en el número de patrocinadores para ambos equipos hasta eliminar cuatro patroci-
nadores en el actual torneo para la LMXF, aunque se permitió que el equipo femenil tuviera un
rediseño propio de su uniforme, podemos apreciar un ejemplo mixto, ‘agridulce’ por así decirlo,
de exclusión y cambio; 5) casos sui generis: Cruz Azul, Chivas y Atlas. Cruz Azul es un caso pecu-
liar, pues se trata del único equipo que presenta diferente marca en el uniforme del equipo varonil
y femenil. Lo anterior también ha llevado a que el escudo del equipo sea diferente. Cruz Azul
también es un ejemplo de una brecha que tiende a cerrarse en cuanto al número de patrocina-
dores. Chivas quizá sea el caso más especial en todo el fútbol mexicano. Como explica Iván Meza
Bernal, de Grupo Radio Centro , el razonamiento de Jorge Vergara fue que, para evitar cerrar el
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equipo femenil, por ser considerado inviable económicamente hablando, habría que buscar un
patrocinador (mismo que terminó siendo Sello Rojo) que le diera viabilidad al equipo. Posterior-
mente, Monterrey también logró contar con un patrocinador propio del equipo femenil (Boka-
dos). Aunque en la actualidad el número de patrocinadores es diferente al del uniforme varonil, y
que el equipo varonil también incorporó a Sello Rojo como patrocinador, han sido interesantes,
si bien por motivos poco “virtuosos”, las oportunidades y desvíos que ha presentado respecto a
las lógicas dominantes hasta ahora. Atlas es un ejemplo dramático de exclusión y diferenciación en
los uniformes. No solo el uniforme femenil es diferente al de los hombres (lo cual no es malo per
se), sino que durante el primer torneo —Apertura 2017— no contó con más patrocinador que
5 Entrevista de 45 minutos con Iván Meza Bernal de Grupo Radio Centro llevada a cabo de manera telefónica el 28 de agosto
de 2018. El entrevistado ha otorgado su consentimiento para que se publique la información compartida.
Universidad Autónoma de Chiapas