Page 216 - LOS BOVINOS CRIOLLOS DE MÉXICO

LOS BOVINOS CRIOLLOS DE MÉXICO.
216 HISTORIA, CARACTERIZACIÓN Y PERSPECTIVAS

y no una actividad ordinaria en un sistema que, aprovechando la abundancia de pastos y agua,
permitía su libre crianza, sin un manejo definido, que se reducía a sólo atraparlo cuando estaba

listo para el abasto y en caso reducido, para su ordeña (Velazco, 2004).

La concepción de la propiedad rural por medio de “Mayorazgos”, resultó la base de los la-
tifundios monolíticos. Esta modalidad permitió la integración de una ganadería extensiva de libre
pastoreo, anterior a las praderas cultivadas. Al consumarse la independencia de México, los lati-

fundios fueron señalados como nocivos y acabaron suprimiéndose ante la ley (Melgarejo, 1980).

En el Veracruz independiente, los liberales asociaron el progreso al fomento de la propiedad
individual, por lo que a partir de 1826, el gobierno estatal impulsó la colonización e incluyó las
tierras bajas de Veracruz. Para 1885 se legisló en torno a la ganadería y en prevención del abigeato

y se introdujeron nuevas razas de ganado, pastos mejorados, rotación de potreros y separación

de animales (Del Ángel, 1994). Como consecuencia, a finales del siglo XIX la ganadería salió de
la crisis originada desde la guerra de independencia, cuando el ganado (manso y cimarrón) pasó a
manos de grupos virreinales e insurgentes, para alimentar a las tropas.

Para Rouse (1977), en el siglo XIX los ganaderos mexicanos no se interesaban en selec-

cionar al ganado, por lo que no existía una raza definida, aunque en el sur de México se estaba
conformando un Criollo de tipo lechero. En 1884 llego de Brasil el primer Cebú, con lo que los
cruzamientos del ganado de dicha raza se esparcieron gradualmente por la zona costera. Nellore,

Gyr e Indobrazil, fueron las razas más favorecidas hasta la segunda guerra mundial. Después de

la guerra, el Criollo fue desapareciendo de las planicies costeras de México y los toros Brahman
se usaron en los hatos Criollos. A finales de 1960, el Criollo habría desaparecido de México, a
excepción de pequeños grupos en el interior del país.

De acuerdo con Melgarejo (1980), en el año de 1903 el gobierno de Veracruz estimuló la

introducción de ganado vacuno mejorado, por lo que particulares introdujeron a sus unidades de
producción vacunos de las razas Suiza y Holandesa y, más tarde, Jersey, Shorthorn y Hereford;
en cuanto a la raza Cebú en la costa baja de Veracruz, el dato más confiable corresponde al año

1923, cuando de un barco que conducía bovinos de esta raza hacia los Estados Unidos, fueron

desembarcados algunos ejemplares para ser llevados a una feria al interior de la República. Dichos

Universidad Autónoma de Chiapas