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LOS BOVINOS CRIOLLOS DE MÉXICO.
244 HISTORIA, CARACTERIZACIÓN Y PERSPECTIVAS

pero 12% del ganado evaluado en la Sierra Nayarita) y está en peligro de extinción; su perma-
nencia depende de que se mantengan aislados en comunidades rurales relativamente inaccesibles

y de bajos recursos económicos, principalmente en las partes altas de la Sierra Madre Occidental

(Martínez, 2005).
En el sureste de México, Méndez et al. (2002) realizaron la caracterización morfométrica del
bovino Criollo de la Mixteca, en las zonas montañosas y semi-desérticas de Oaxaca, Guerrero

y Puebla. Entre sus características sobresalen la resistencia física, su agilidad y el tamaño y forma

de los cuernos, encontrando animales de bajo peso corporal (176±51 kg), con perímetro torá-
cico de 134±10 cm, y alzada a la cruz de 103±16 cm. El bovino Criollo Mixteco es criado por
diferentes grupos de indígenas y mestizos en sistemas de producción que los autores califican de

“primitivos”, pero que deberían considerarse muy eficientes desde el punto de vista etnozootéc-

nico, toda vez que han permitido la supervivencia de los animales, por no mencionar el aporte
que hacen a la propia persistencia de las familias campesinas que viven en condiciones de alta
marginación en la región Mixteca.

En su estudio monográfico sobre los bovinos Criollos de América, de Alba (2011) describe

con detalle las características de otras razas locales de bovinos de México, como el Criollo Le-
chero Tropical (CLT) que se extiende por amplias zonas del continente. Esta raza está formada
por varias estirpes con visible parecido y funcionalidad similar entre ellas, y que se les ha denomi-

nado con el nombre genérico de Criollas Lecheras Tropicales, cuyas características incluyen alta

tolerancia al calor, pelaje corto, resistencia a los parásitos internos y externos, elevada fertilidad y
longevidad; el color del pelaje es rojo, con algunas variaciones en intensidad. Actualmente ya se
cuenta en México con una asociación nacional de criadores de esta raza.

El ganado Rarámuri de Chihuahua presenta un bajo peso al nacer en vacas igualmente pe-

queñas (239 kg), mientras que los toros alcanzan entre 293 y 315 kg según se hallaran en las
barrancas o en las zonas altas, respectivamente. Este ganado muestra una alta capacidad de so-
brevivencia en sitios donde el pasto es escaso, y cubre terreno con increíble facilidad para buscar

agua. El color de la capa es muy variable, predominando animales de laterales rojos o negros,

berrendos (cuando el color se va fraccionando en pequeñas salpicaduras hacia el tren posterior) y

Universidad Autónoma de Chiapas