Page 238 - Actores_ReconfiguracionSocioterritorial_Desarrollo_Chiapas
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       	                                           LISBER FARRERA REYES      238                             MARÍA LUISA TREJO SIRVENT               requieren un contexto situado en el espacio y tiempo, con características que la distinguen y le dan               referencia. Su interpretación y comprensión no tiende a la generalización; sin embargo, puede               servir de análisis en los procesos de otras regiones.                    La noción de región se ha estudiado desde diferentes posturas e interpretaciones, hacien-               do uso a una diversidad y pluralidad de conceptos. Cuervo expresa, que el concepto de región               se caracteriza por su “polisemia por la multiplicidad de contenidos asignados; polivalencia por la               diversidad de valores asignados: éticos, políticos, emocionales, etc.; y multiescalaridad por la di-               ferente resolución espacial asignada, como fruto de las propias acepciones y valoraciones: local,               subnacional, internacional” (2003:27). Esta concepción de región, hace referencia a la diversidad               de usos e interpretaciones.                    Por su parte Gasca, establece que la región puede ser “un recurso metodológico que, a tra-               vés de criterios de homogeneidad, funcionalidad y análisis sistémico, permite dar cuenta de pro-               cesos de diferenciación, asociación espacial y relaciones funcionales entre diferentes elementos”               (Gasca, 2009:44). De lo que se desprende que utilizarla como recurso metodológico, permite               acotar el espacio donde se ubica el objeto de estudio.                    En la investigación, la visión de región entrecruza los elementos locales y globales, involucra               los ámbitos internos y externos del objeto de estudio. Se trata de una región multidimensional               que involucró al espacio y los procesos sociales.                    La lectura y la escritura, por otro lado, son prácticas sociales situadas. Se parte de la noción               de culturas lectoras o literacidades, lo que implica hacer referencia a los contextos sociales en               las que tienen lugar y vincularlas con procesos sociales más complejos. Es decir, se consideran               las diversas maneras de conocer y pertenecer al mundo de la lectura, así como las actividades y               los procesos lectores particularizados. El estudio no se pretendió recrear un macro relato o una               visión universal, sino de tener una perspectiva más rica y extensa de la diversidad de posibilidades               concebidas alrededor de los fenómenos de literacidad.                    La biliteracidad desde una mirada regional, responde precisamente a una perspectiva               sociocultural sobre los usos de una doble literacidad en una comunidad indígena bilingüe. Se               sitúan los usos y prácticas sociales de dos literacidades, que se establecen en el contexto local,                             Universidad Autónoma de Chiapas
       
       
     





