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LA BILITERACIDAD COMO PRÁCTICAS DE LECTURA Y ESCRITURA SITUADAS 247 Los estudios sobre literacidad, se han movido hacia la exploración de interrelaciones cons- titutivas más complejas bajo el enfoque de prácticas sociales. La exploración de las literacidades a través de contextos específcos, trasciende una dimensión exclusivamente lingüística, e incluye las dimensiones históricas, políticas y sociológicas. De acuerdo a la corriente teórica de los NEL, se está contribuyendo con construcciones teóricas específcas para entender el desarrollo teórico-metodológico de la literacidad. Las nocio- nes que han surgido como unidades de análisis han sido producto de prácticas letradas y eventos letrados. Esta perspectiva teórica, comienza por reconstruir la conceptualización de la lectura y la escritura como parte sistémica de las prácticas y eventos sociales. Street (1993), por su parte utiliza la noción de prácticas letradas para referirse tanto a las conceptualizaciones como a las maneras en que se usa la literacidad. Sin embargo, expresa que dichas unidades no son unidades de comportamientos observables, pues también implican rela- ciones sociales, valores, sentimientos y actitudes que no incorporan solo eventos letrados; sino modelos donde la gente construye de esos eventos y de a ideología inmersa en el sustento de estas construcciones. La noción de práctica letrada de acuerdo a Barton y Hamilton (2004), ofrece una forma de conceptualizar el vínculo entre las actividades sociales de la lectura y la escritura y las estructuras sociales donde se encuentran adheridas y que ayudan a delinearlas. Son formas culturales genera- lizadas de uso de la lengua escrita, donde la gente encuentra inspiración para sus vidas. Las prácti- cas letradas son lo que la gente hace con la literacidad, que en cierta forma incluye cierto grado de conciencia de las personas con respecto a sus construcciones y sus discursos; así como la manera en que la gente da sentido y habla de ella. Si bien es un proceso interno del individuo, las prácticas al ser parte de los procesos sociales que conectan a las personas entre sí, incluyen conocimientos socializados y compartidos, que son representados en identidades sociales e ideologías. Zavala (2009), defne a la noción de práctica letrada como las maneras de leer y escribir en el marco de un propósito social específco. Los autores Merino y Quichiz (2010), agregan que estas maneras de leer y escribir se con- fguran con sentido dentro de la vida de los sujetos pertenecientes a una comunidad específca. Universidad Autónoma de Chiapas