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LA BILITERACIDAD COMO PRÁCTICAS DE LECTURA Y ESCRITURA SITUADAS 249 diversidad de textualidades asociadas a estas prácticas. Esas múltiples literacidades cuentan con maneras particulares de leer y escribir. Los diferentes ámbitos donde se desarrollan las literacidades, tienen sus propias prácticas sociales y maneras de expresión, leer, hablar, escribir y pensar. Estos ámbitos son contextos particulares donde las personas usan y aprenden la literacidad. En los diferentes ámbitos existen actividades que confguran estas prácticas y hay formas regulares y específcas que los individuos utilizan en diferentes eventos letrados, de acuerdo a los contextos situados en que se desarrollan las interacciones sociales. Las instituciones sociales tienen en estos ámbitos de la vida cotidiana, una intervención ideo- lógica al desarrollar y estructurar actividades y prácticas sociales específcas que se refejan en la lectura y escritura de los individuos. Esto para Barton y Hamilton (1998), tiene grandes implica- ciones ideológicas debido a que instituciones sociales, como la escuela, imponen ideologías do- minantes que se transferen a las prácticas de literacidad. Estas prácticas dominantes se encarnan en las relaciones e interacciones sociales y forman parte de una confguración integral de la litera- cidad, haciéndose dominante. En la vida cotidiana, existen otras prácticas de literacidad que no son tan visibles, a veces son demeritadas por la dominante. Estas prácticas locales son llamadas vernáculas. Las prácticas vernáculas, de acuerdo con Zavala, “son aquellas prácticas letradas que tienen su origen en la vida cotidiana de las personas y que no están reguladas por las reglas formales y los procedimientos de las instituciones sociales dominantes” (2009:27), son maneras de acercarse a un texto desde las necesidades e intereses propios; es decir que no han sido impuestos por alguna institución y tienen su origen en la cotidianeidad de las personas. Se vuelven de cierta manera híbridas, ya que aluden a una serie de prácticas de lectura y escritura de diferentes ámbitos. Desde la etno- grafía Martos (2010), asume una interdependencia de los fenómenos de área, haciendo visible lo invisible, de iluminar ciertos aspectos para ampliar la percepción de un paisaje o espacio que presumíamos conocer. Es un hecho, que el tejido social de una comunidad con prácticas de literacidad, por pequeña que sea, es siempre compleja, objeto de fracturas, matices y collages, del mismo modo que en Universidad Autónoma de Chiapas